Experiencia y eficacia eliminando plagas en la madera

Pasión por las Termitas

Termicor nació del sueño de una persona, Daniel Rosselló (Dani, para los amigos y para ti… porque sí, esa persona soy yo).

¿Sabes? A veces la vida te plantea situaciones inesperadas pero, al mismo tiempo, muchas veces te da las respuestas.

Desde pequeño me gustan los “bichos”. Aún recuerdo las tardes con los amigos compitiendo por ver quién capturaba el insecto más raro (por cierto, tengo una anécdota muy buena sobre el día que me topé con una serpiente… si quieres te la cuento cuando nos veamos y nos reímos un rato).

Por eso no me extrañó acabar dedicándome al sector del control de plagas.

Siempre quise poder trabajar con libertad, aplicando la metodología y los productos en los que creo y confío… pero eso no es posible cuando trabajas bajo el criterio de otros.

Como te he dicho antes, a veces la vida te da las respuestas.

Decidí poner en marcha mi propio negocio cuando, las empresas más potentes del sector, empezaron a acudir a mí para pedirme que les hiciera sus tratamientos de madera o que directamente les llevara el departamento de xilófagos.

Eso me hizo abrir los ojos y darme cuenta de que era una de las personas más formadas y especializadas en Mallorca. Entonces lo vi claro, era hora de cumplir mi sueño cuidando hasta el más mínimo detalle.

Por ejemplo, en nuestro logo, nada es por casualidad:

• El símbolo: simula las galerías que excavan las termitas en la madera.
• Nuestros colores: el naranja que refleja la pasión y entusiasmo con el que trabajamos y el marrón de la tierra donde viven las termitas subterráneas.

Como curiosidad, te diré que el nombre de Termicor surge de la combinación de mis dos tratamientos favoritos: las TERMItas y la carcoma (CORc en mallorquín).

Y, por último, te cuento lo que hago cuando no estoy trabajando…